CARTA A STALIN.

FERNANDO ARRABAL

HISTORIA DEL SIGLO XX Español, Castellano Observaciones : PÁG, 195 Y 196. UN POCO ARRUGADA. «Señor Dzhugashvili [Stalin]: siempre he perdido cuando he escrito a los poderosos o cuando cometí el error de dirigirme a los caudillos en el poder y con el de destruirme. Pero usted ya no tiene ninguno, don Iósif Vissariónovich, usted, que fue secretario general de su partido, generalísimo de todos los ejércitos, gran poeta de una cultura excepcional, gran orador de un carisma sin igual, genialísimo líder, educador de la humanidad, guía supremo, mariscal de energía prodigiosa, el hombre al que más amamos y padrecito de todos los pueblos.» Así comienza la "Carta a Stalin", el nuevo libro del genial Fernando Arrabal, uno de los grandes escritores españoles contemporáneos. En ella despliega su habitual actitud iconoclasta ante los poderosos -ya sean políticos, artistas o intelectuales- y ante todo lo considerado establecido, como ya hizo en la polémica y famosísima "Carta al general Franco", publicada en vida del dictador. «Arrabal pertenece a esta magnífica estirpe de creadores 'qui n'ont rien vu'. Su lozanía e inconformismo permanecen intactos. Su frescura, capacidad innovadora y ejemplaridad son únicas. Si no existiese Arrabal, ¡habría que inventarlo!» Juan Goytisolo. ACOGIDA DEL LIBRO "Fernando Arrabal (Melilla, 1932) asegura que ha conocido a pocos jefes de Estado "tan eruditos y tan malos" como Stalin (1879-1953). El escritor, que no ha militado nunca en ningún partido político, acaba de editar 'Carta a Stalin' (La Esfera de los Libros) para "no tener que hablar más de política". Su nuevo trabajo, que puede leerse como una biografía del dictador soviético, refleja las luces y las sombras de un jefe de Estado sanguinario". Amelia Castilla, "El País". "En 'Carta a Stalin' (La Esfera de los Libros), Fernando Arrabal recorre los espisodios más notables de la biografía del líder soviético, haciendo especial hincapié en la importancia que para él tuvieron las mujeres. (...) Fernando Arrabal, tan vanguardista como iconoclasta y heterodoxo, ha tratado de descifrar cómo Stalin consiguió rodearse de los hombres más inteligentes de su época". Pilar Ortega, "El Mundo".